descripción

Imagina abrir las ventanas y que entre el sol a raudales. En la calle General Dávila, en pleno centro de la ciudad pero en una de esas calles amplias donde no te sientes encerrado, este piso te regala luz, aire y una vista que llega hasta el mar.  Es un cuarto piso todo exterior, así que además de vistas despejadas, tendrás silencio. La orientación sur te da sol desde el desayuno hasta la última taza de té del día. Está totalmente reformado, con dos habitaciones y un detalle que para muchos es un regalo: la cocina está sin amueblar, para que la diseñes exactamente como quieras, sin heredar azulejos imposibles ni muebles que no van contigo.  La fachada del edificio ha sido reformada con SATE, una segunda piel aislante que protege en todas las estaciones. En invierno, conserva el calor y reduce la necesidad de calefacción; en verano, mantiene el interior fresco sin abusar del aire acondicionado. Esto se traduce en facturas energéticas más bajas y un hogar más sostenible. Además, el aislamiento exterior mejora el confort acústico, protegiendo de ruidos de la calle, y alarga la vida de la fachada al resguardarla de la humedad y las inclemencias del tiempo. El resultado es un edificio más eficiente, silencioso y con una estética renovada que revaloriza cada vivienda. El piso cuenta con ventanas de pvc climalit, suelo de madera y calefacción de gas natural. Contarás con la libertad de de ponerlo a tu gusto. Solo faltas tú y tus ideas.