descripción

Os presentamos esta fascinante masía histórica ubicada en el municipio de Toses, en la comarca del Ripollès, provincia de Girona. Esta propiedad ofrece la oportunidad única de restaurar un conjunto rural tradicional con historia y carácter, en un entorno natural de gran belleza y tranquilidad. Además, cuenta con concesión otorgada por la Generalitat para el funcionamiento de una central eléctrica, lo que amplía de forma notable las opciones de uso y rentabilidad del conjunto. La finca se asienta sobre 314 hectáreas de terreno, que combinan bosques autóctonos, prados naturales y zonas de pasto. Dispone de tres edificaciones principales: Masía principal de 900 m², distribuida en dos plantas de 450 m² cada una, con estructura sólida y gran volumen interior, ideal para rehabilitar como vivienda principal o casa rural. Edificio secundario de 300 m², también en dos plantas (150 m² por nivel), perfecto para uso agrícola, establo o casa de invitados. Tercer edificio de 190 m², en dos niveles, ideal como almacén, garaje o anexo de servicio. En conjunto, el complejo ofrece 1.390 m² construidos con un enorme potencial para desarrollar un proyecto de restauración a medida. Esta propiedad destaca por su amplitud, privacidad y versatilidad. Es ideal tanto para quienes buscan una gran finca residencial o turística, como para emprendedores interesados en proyectos energéticos o agroindustriales. Gracias a su concesión vigente para una central eléctrica, la finca ofrece una oportunidad única de combinar la rehabilitación patrimonial con un uso energético o productivo sostenible. La magnitud del terreno permite también la instalación de infraestructuras rurales, cultivos ecológicos o actividades ecuestres, manteniendo siempre el encanto natural y la autenticidad del entorno. Situada en el corazón del Pirineo de Girona, la finca disfruta de un entorno idílico rodeado de bosques, prados y montañas. Desde la propiedad se puede acceder fácilmente a rutas de senderismo, zonas de pasto y espacios naturales protegidos, lo que la convierte en un enclave ideal para quienes buscan tranquilidad y contacto directo con la naturaleza. La finca está bien comunicada con Ribes de Freser, La Molina, Puigcerdà y las pistas de esquí de Vall de Núria, combinando aislamiento y accesibilidad.