descripción

Esta masía tradicional catalana se remonta al siglo XVIII y está situada en uno de los parajes más exclusivos del Baix Empordà, dentro del reconocido Triángulo de Oro, rodeada de campos de cultivo, de bosques y de los principales pueblos medievales de la zona. La finca en su conjunto dispone aproximadamente de 11,6 hectáreas de terreno, con una masía con un total de 695 m² construidos, distribuida en dos amplias plantas y un desván pendiente de una reforma interior, además de porches, terrazas y un cobertizo funcional como garaje o almacén. En la planta baja nos recibe un amplio salón abovedado, una gran cocina con office y chimenea, una sala de estar abovedada con chimenea, una bodega, un amplio almacén a doble altura convertible en apartamento de invitados con entrada independiente y un baño. Llegamos a la primera planta, donde nos recibe un gran distribuidor muy luminoso, que da paso a los cinco dormitorios dobles y a un baño. En esta zona se sitúan dos terrazas en la fachada sur y oeste, que ofrecen excelentes vistas al campo, al pueblo y a la montaña. En la planta superior se ubica el desván, que está pendiente de una reforma interior y sería ideal como gran estudio de trabajo, sala de juegos o incluso se podrían habilitar dos amplios dormitorios más con su respectivo baño. En esta planta también encontramos una terraza con vistas abiertas. La masía se encuentra en buen estado estructural y de conservación con varios elementos originales de la época, tales como suelos de terracota, techos abovedados, vigas de madera y muros de piedra, si bien aún dispone de un gran margen de mejora con una serie de obras de actualización que permitirían conseguir un mayor nivel de confort.